domingo, 15 de agosto de 2010

Reflexión final...


La docencia siempre ha estado como parte de mi vida. Aunque mis padres se dedican al área de la economía, mi madre junto a su hermana, formaron hace 30 años una institución educativa que he visto crecer. Creo que eso tuvo que influir en mi deseo de ser docente. Desde que estoy en primer año de la carrera de odontología, siempre critiqué la forma de dar lecciones y de evaluar que tenían algunos profesores, inclusive, algunos me decían quiero verte a vos dando lecciones y haciendo exámenes. En parte esas palabras me motivaron a llevar esta Maestría, aparte, que siempre he tenido una espinita por seguir aprendiendo de todo un poco.
Durante estos dos meses en la maestría he aprendido no solo sobre educación, sino sobre muchas áreas más.
Este curso de desarrollo de habilidades de pensamiento crítico y creativo me llamó la atención por nombre, y no sólo eso, a voces bajas se oían comentarios de las exigencias que conllevaba este curso.
Sin lugar a duda, es un curso que demanda gran cantidad de tiempo, pero que al pasar las semanas van dando los frutos. Luego de la conferencia expuesta por la profesora Silvia al inicio del cuatrimestre, y que el grupo de compañeros y compañeras nos reunimos a hacer un rato de conversación, no entendí de manera clara cuando se nos dijo que al final del cuatrimestre veríamos los frutos, y hasta ahora lo entiendo.
Ahora que reviso cada una de las intervenciones en este blog, noto las deficiencias que tenía cuando las escribí en un inicio, y ahora las puedo mejorar de una manera más elocuente.
El conocer sobre la neurociencia, sobre el enfoque de la Enseñanza para la Comprensón, así como las el utilizar diferente tipos de tecnología, como los blogs, wikis, googledocs, hacen mucho más enriquecedor este proceso.
El curso en realidad superó mis espectativas. Aunque no le pude dedicar el tiempo que hubiera querido, y que al mismo tiempo exigía el curso, creo que se he logrado integrar al final todo el conocimiento obtenido tanto en las lecturas asignadas, como el leer los blogs de los demás compañeros y compañeros donde se puede notar otra visión de la misma materia, y otra forma de plantearla, realizando así una retroalimentación bastante interesante.
Estoy seguro que luego de este curso el proceso de enseñanza-aprendizaje va ser diferente para cada uno de los participantes. Conocer sobre los portafolios virtuales, diarios de aprendizaje, métodos de casos, así como formas de motivación y de desarrollar el pensamiento crítico y la creatividad en los estudiantes, han valido más que la pena.
El reto que ahora me toca es involucrar todo este conocimiento en la enseñanza de la odontopediatría. Tengo en mis cabeza múltiples ideas para complementar lo aprendido con la teoría.
Seguiré estudiando sobre los conceptos aquí aprendidos, intentaré involucrar gran parte de las actividades que vimos durante el cuatrimestre en los cursos que imparto, y trataré de recomendar este curso a mis colegas, con el fin de que todos aprendamos este nuevo paradigma de educación.

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