martes, 8 de junio de 2010

La importancia de una retroalimentación


Cuando realizamos nuestro trabajo y éste recibe críticas constructivas, nos vamos motivando cada vez a mejorar.
Las críticas deben ser tomadas de la mejor manera, con el fin de poder aprender de ellas, y tomar lo mejor y desechar lo peor.
Agradezco a todas las personas que han pasado por aquí en algún momento, y se han tomado su tiempo para escribir algunas palabras de aliento o mejora para lo que intento plasmar.
Pasar de ser un odontopediatra, dedicado exclusivamente a la consulta privada a ver niños, a convertirse en un docente quien quiere que sus estudiantes aprendan y obtengan un conocimiento aún mayo que el que hasta ahora tengo, es un meta clara que me plasmé hace algún tiempo, y me motivó a llevar a esta maestría.
Con fuertes críticas a la experiencia virtual, cada día voy sacándole el mayor provecho, inclusive hasta con la intención de poder aprender más sobre éste sistema para utilizarlo como docente en un futuro.
Comparto las opiniones de algunos compañeros y compañeras al decir que en los diferentes cursos no hemos memorizado nada, pero si hemos aprendido muchísimo, logrando hablar con propiedad de temas que hasta hace algunos meses eran desconocidos por nosotros.
Definititavemente la educación va cambiando, y nosotros mismos nos vamos a convertir en agentes de ese cambio. Conocer temas actuales como lo son la neurociencia, la enseñanza para la comprensión, la evaluación por competencias, entre otro montón de información, hacen que uno se interese por esta área cada vez más, e invite a muchos colegas y personas afines de la docencia a interesarse, así todos podemos ir ampliando nuestro conocimiento, y haciendo un cambio en la forma de ver la educación en la actualidad.
Hacer las cosas y al mismo tiempo tener un aporte crítico hacia ellas, lleva a que nosotros aprendamos los unos de los otros, al mismo tiempo que aprendemos sobre nuevas tecnologías y su gran uso a nivel personal, laboral, e inclusive social.

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